La escuela de
Huanchí que ha implementado cinco innovadores proyectos
En Áncash, alumnos del colegio del
centro poblado de Huanchí participan activamente en talleres enfocados a un
mejor aprendizaje
Texto y foto: elcomercio.pe
En la escuela de Huanchí N° 84177, en el distrito de
Cashapampa (provincia de Sihuas, región Áncash), el director Anselmo Vega
Vargas ha implementado cinco innovadores proyectos en beneficio de sus alumnos.
Antes de que los 47 estudiantes lleguen hasta este
centro poblado para iniciar su jornada, de la cocina empiezan a emanar los
primeros aromas de la mañana. Ahí, las madres de familia y los cuatro docentes
de esta escuela multigrado - una de las 11 que hay en Cashapampa -, prenden los
fogones para preparar el alimento de los niños. Para varios de ellos esta será
la comida más importante de su jornada.
En un horno ecológico diseñado por la misma escuela
se cocinan las carnes y verduras que se sirven en el desayuno escolar de los
niños. En el comedor, el colegio almacena parte de los alimentos que el programa
Qali Warma lleva desde hace 4 años. Según el director Anselmo, la mejor
alimentación les ha permitido mejorar sus índices de aprendizaje.
La escuela de Huanchí tiene varios ambientes
dispuestos en armonía con la naturaleza que la rodea. Uno de los proyectos que
se encuentran son el biohuerto, un espacio para hidroponía, un cuadrante para
hacer humus en base a los desperdicios que se generan en la escuela, y una
pequeña parte para sembrar maíz. Los alumnos aprenden y consumen lo que ahí se
produce.
Para él, este tipo de incentivos son importantes
para continuar con los esfuerzos. "En Sihuas no hay mucha población
educativa, eso hace que nos esforcemos más. No hay por la migración, que es uno
de los problemas", relata.
Pero uno de los proyectos que más satisfacciones ha
generado entre los menores y los mismos docentes es la radio escolar que han
instalado en uno de los ambientes
Radio Escolar “La voz del estudiante”
(Hunchi-Cashapampa-Sihuas-Amcash)
"La voz
del estudiante" y lo pudieron instalar gracias a un concurso que ganaron
en el año 2008, los niños pueden transmitir a la comunidad lo que aprenden en
las clases. Solo hay un requisito: primero hay que aprender a leer para
participar, comenta el director, que impulsó la idea para que los niños se
expresen sin temor. "Había niños que se tapaban la cara para hablar",
detalla Anselmo.El director comentó que en el año 2015 la escuela de Huanchí
recibió un certificado de bono educativo debido a que el 80% del alumnado
obtuvo buenos resultados en el logro de aprendizajes en la evaluación censal.
Los estudiantes obtuvieron AB en la evaluación censal.
Para él, este tipo de incentivos son importantes
para continuar con los esfuerzos. "En Sihuas no hay mucha población
educativa, eso hace que nos esforcemos más. No hay por la migración, que es uno
de los problemas", relata
Un año después de obtener aquel certificado, en la
escuela de Huanchí instalaron un pequeño taller de cerámica donde los niños
esculpen con arcilla sus propios jarritos "mágicos", diseñados
especialmente por ellos, que eventualmente presentan en ferias.