LIBRO ANCASH DE 1873 OBRA DE ANTONIO RAIMONDI
PUERTO DE PURHUAY, UCHUS EL MARAÑÓN ESCRITO POR EL SABIO ANTONIO RAIMONDI QUE VISITÓ QUICHES EL AÑO 1868
A RAÍZ DE PUESTA LA PRIMERA PIEDRA DE LA CONSTRUCCIÓN DEL PUENTE QUE LLEVA EL NOMBRE DEL
SABIO ITALIANO ENTRE SIHUAS Y PATAZ
(MARAYBAMBA- UCHUS-2015)
QUICHES
Este pueblo se halla fundado sobre una meseta en la banda
izquierda del Río Marañón a 3 013 m.s. n.m (3 605varas) de elevación sobre el nivel del
mar y tres leguas del puerto de Purhuay.
Quiches tiene e muchos terrenos pero no tiene agua para el riego. Bajan de los
altos inmediatos unos pequeños hilitos de agua que se pierden en llegar. El agua
va saliendo de trecho en trecho en forma de manantiales tan escasos que apenas
son suficientes para regar miserablemente unos pequeños alfalfares para la mantención
de las bestias. Para las otras sementeras no hay recursos que las aguas de la
lluvia y cuando estas son escasas se pierden
los sembríos de maíz, trigo, etc., como ja sucedido en 1868, año en que yo visité
este lugar y que ha sido uno de los años más escasos de agua.
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| QUICHES ACTUAL |
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| ANTONIO RAIMONDI |
El temperamento de Quiches es inmejorable, el terreno muy
fuerte y fértil y sólo falto agua para que este pueblo goce de todos los beneficios
de la naturaleza. Quiches, con agua; sería
uno de los mejores puntos del Perú, pero por esta suma escasez está sujeto a
sufrir el hambre puesto que en los años de poca lluvia como hemos dicho más arriba
se secan todas la sementeras y de con siguiente hay carestía.
El trigo es su principal
producción; el maíz da soberbiamente pero está más sujeto a perderse
necesitando mayor cantidad de agua.
Desde el pueblo de Quiches se divisa al otro lado del Marañón
la elevada cadena de cerros que separa la hoya de este río de la del Huallaga ,
distinguiéndose en la faldas varia haciendas
pertenecientes a las provincia de Pataz.
El camino que baja de Quiches al Marañón es bastante bueno,
y exceptuando algunos trechos, es muy inclinado ni ofrece ningún mal paso. En los puntos este camino se encuentra agua y
por consiguiente hay casa de sembríos. El primero de estos lugares se llama
Joquillos y el segundo Pacaycocha. En
este último lugar hace ya bastante calor para permitir el cultivo de caña de azúcar.
ELPUERTO DE PURHUAY
Este lugar se halla situado en la misma orilla de río
Marañón a 1533 metros sobre el nivel del
mar y tiene unos pocos ranchos donde viene algunos in dividuos que
sirven de balseros y se encargan de pasar de una orilla a la otra del Marañón.
Para esto se sirven de unas rústicas balsas formadas simplemente de cinco o seis
palos amarrados, con tabladillo un poco más elevado donde se sitúan los transeúntes
y se acomodan las cargas.
El Marañón en el puerto de Puruhuay tiene el tiempo de
creciente un poco más de 90 metros de ancho y no presenta un punto favorable para la construcción
de un puente por ser terreno de ambas orillas deleznable;
siendo formada la tierra suelta o de arcilla coloradas.
En el puerto de Purhuay se experimenta durante el día un
calor excesivo subiendo el termómetro a 33 grados centígrados. A primera vista
no se comprende como en este punto haga más calor que en los Puertos del Marañón situados más abajo ,pero teniendo en cuenta y en consideración lo estrecho de la
quebrada y la suma aridez del terreno, no se puede explicar fácilmente el
sofocante calor que se experimenta en esta lugar.
En efecto, cuando el cielo esta sereno; el sol calienta de
tal modo que las faldas de los cerros y el árido terreno de la orillas, dan lugar
a una fuerte reverberación y siendo la
quebrada muy estrecha ,los rayos caloríficos emitidos por la rocas calentadas de ambas orillas ,se
cruzan, por decirlo así, y hacen elevar
de un modo extraordinario la temperatura de la atmosfera.
En el puerto de Purhuay, se podría formar una hacienda
magnifica, habiendo terrenos llanos y agua en abundancia para el riego, la que
se puede traer con poco costo del Río de Chingalpo (o Ajtuy) que desemboca al Marañón a poca
distancia; pero el terrible azote de la tercianas acabaría con los operarios .Este es el poderoso obstáculo
que impide prosperar a la hacienda de Caña, Uchos; situada en la orilla opuesta
un poco más arriba.
El Purhuay y Uchos son
talvez los puertos donde esta plaga mortífera acaba con los operarios y balseros acostumbrados a vivir en el lugar llamado
Huayo, situado más abajo en la orilla del mismo Marañón .donde se padecen
muchas tercianas, y sonde por consiguiente se creía aclimatados, fueron acometidos por esta enfermedad después de vivir
un mes en el puerto de Purhuay o en Uchos.
Para evitar en cuan to sea posible los estragos de esta enfermedad,
los operarios que bajan a trabajar a Uchos o al Purhuay no permanecen sino pocos
días, casi nunca más de quince; sin embargo, muchos de ellos regresan llevándose
la terciana en el cuerpo.
Pocos son los que pueden permanecer en este cementerio y
estos pocos se ha establecido desde su infancia combatiendo continuamente con
la tercianas hasta aclimatarse o morir. Un balsero nació en el lugar sea por
su naturaleza o por que la madre estaba ya aclimatada, lo cierto que no ha sido
atacado y parece gozar de inmunidad para las tercianas, por su cuerpo
descarnado y su color pálido amarillento, parece que llevasen el sello de la
enfermedad.
En el Purhuay las mujeres paren normalmente, pero los niños
se mueren casi todos ,en la edad de uno a dos meses ,por a algún ataque de
terciana siendo muy raros los que pasan de seis meses.
De los hijos de balseros establecidos desde algunos años en
el puerto de Purhuay, sino solo de los varios que ha tenido un tal Santiago Moreno,
ha podido escapar de la muerte y actualmente tiene ocho años y goza de perfecta
inmunidad.
Los operarios que bajan a trabajar al Purhuay de la hacienda
de Uchos son comúnmente del pueblo de Quiches donde por su elevación no hay
tercianas.
Así, a pesar de que el pueblo de Quiches está fundado sobre
los mismos terrenos que se observan en los puertos de Purhuary no tiene
tercianas por hallarse a mayor altura sobre el nivel del mar.
Lo que fue el prospero puerto de Purhuay(en la Colonia)
En la margen izquierda del Marañón esta asentado el Purhuay
anexo del distrito de Quiches en el norte de Ancash.
El villorrio en la colonia fue centro próspero de
actividades industriales, en puerto para la Montaña. Convergían ahí los mineros
de Pataz y Huacrachuco y de la cuenca aledaña del río, especialmente las minas
de la quebrada de Ajtuy y de Acobamba. Era el mercado de transacción del oro.
Españoles y portugueses establecieron el primitivo campamento minero, sus
sucesores lo remozaron y construyeron para su comodidad solares y para la
peonada rancherías de madera o de caña.
Había sólo una calle y a ambos lados estaban ubicados los
establecimientos de comercio o las moradas de los principales con sus huertos.
Más abajo, en la desembocadura del Ajtuy habían más
campamentos mineros para los obreros de la mina "Huamán" en especial
y de los aledaños de Chingalpo y Acobamba.
En el río una multitud de canoas y balsas flotaban pendiente
de sus amarras. No faltaron gabinetes de recreo armado sobre las balsas, eran
como el refinamiento de lujo exótico. El río entonces era un remanso y daba la
sensación de un basto lago, casi inmóvil, era un río acogedor. En sus playas se
recogía el oro que los huaicos de las quebradas volcaran sobre ella. Las arenas
del Purhuay eran como las arenas de oro de la fábula.
En este villorrio se dieron cita el destino aventurero y
aguerrido de hombres osados, acicateados por la ambición de la riqueza y la
codicia del oro, no les amedrentó la insalubridad del trópico ni las hecatombes
telúricas.
Aparte del menester minero la vida social se reducía a
cierta actividad familiar constituida por las clases dirigentes. El comercio
del oro hizo próspera la dilación de aquellas familias. Muchas de ellas tenían
sus casas en Quichez situado en la parte alta del Purhuay.
Aquél villorrio azotado por los sismos, por los aluviones y
huaicos, fue constantemente destruido y constantemente reedificado. Al presente
es un puerto fluvial, melancólico y despoblado, vive más de la evocación que de
la acción. En las ruinas de aquel villorrio están los testimonios de sus
grandeza y de su historia.
Ligado íntimamente al villorrio está el río Marañón. El río
era la providencia de la zona. La carga de su limo cubría las playas con el oro
de la ruta y en sus aguas los balseros aprendieron a luchar con las fuerzas de
la naturaleza.
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HACIENDA DE JOCOS
Esta hacienda es
bastante grande pero desgraciadamente muy escasa de agua .La casa Hacienda se
halla a 2750 metros sobre el nivel del mar y sus terrenos se extienden hasta la
orilla del Marañón. Así en la Hacienda de Jocos se obtiene productos muy
variados, cultivándose en los terrenos cerca del Marañón las plantas de los
climas cálidos tales como la coca, café cacao naranjas, caña etc., y en los templados;
maíz trigo cebada. etc.
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| CACAO EN JOCOS SIHUAS SE CULTIVA EN 1868 A SEGUIR CON LA SIEMBRA |
